lunes, 19 de septiembre de 2011

Unas lineas del libro: "El Universo en una cascara de nuez" de Stephen Hawking.


¿SERÁ NUESTRO FUTURO COMO STAR TREK o NO?

Cómo la vida biológica y electrónica se seguirá desarrollando en complejidad
con un ritmo cada vez más rápido



El motivo de que la serie Star Trek sea tan popular es que presenta una visión del futuro segura y reconfortante. Soy un entusiasta de esta serie, por lo cual resultó fácil persuadirme a participar en un episodio en que jugaba a póquer con Newton, Einstein y el Comandante Data. Les gané a todos pero, por desgracia, hubo una alerta roja y no pude recoger lo que había ganado.
Star Trek muestra una sociedad muy avanzada respecto a la nuestra en ciencia, tecnología y organización política (Esto último no resulta difícil). En el tiempo que va desde ahora hasta entonces debe haber habido grandes cambios, pero se supone que, en el período mostrado en la serie, la ciencia, la tecnología y la organización de la sociedad han alcanzado un nivel próximo a la perfección.
Quiero cuestionar esta imagen y preguntarnos si la ciencia y la tecnología llegarán a alcanzar un estado final estacionario. En los diez mil años transcurridos desde la última glaciación, en ningún momento la especie humana se ha hallado en un estado de conocimiento constante y tecnología fija. Incluso ha habido algunos retrocesos, como en las edades oscuras posteriores a la caída del Imperio Romano,
pero la población mundial, que constituye un indicador de nuestra capacidad tecnológica de conservar la vida y alimentarnos, ha aumentado incesantemente, con sólo unas pocas caídas como la debida a la Peste Negra.

En los últimos doscientos años, el crecimiento de la población se ha hecho exponencial; es decir, la población crece cada año el mismo porcentaje. Actualmente, la tasa de crecimiento es de 1,9 por ciento anual. Esto puede parecer poco, pero significa que la población mundial se duplica cada cuarenta años.
Otros indicadores del desarrollo tecnológico reciente son el consumo de electricidad y el número de artículos científicos publicados, que también muestran crecimiento exponencial, con tiempos de duplicación menores que cuarenta años. No hay indicios de que el desarrollo científico y tecnológico se vaya a frenar y a detenerse en el futuro próximo —ciertamente no en la época de Star Trek, que se supone que ocurre en un futuro no muy lejano—. Pero si el crecimiento de población y el consumo de electricidad siguen al ritmo actual, en el año 2600 la población mundial se estará tocando hombro con hombro, y el consumo de electricidad hará que la Tierra se ponga al rojo vivo. Si se pusieran en fila todos los nuevos libros publicados, nos deberíamos desplazar a ciento cincuenta kilómetros por hora para mantenernos al frente de la hilera. Naturalmente, en el año 2600 los nuevos trabajos científicos y artísticos tendrán formato electrónico, en vez de ser libros y revistas. Sin embargo, si continuara el crecimiento exponencial, se publicarían diez artículos por segundo en mi especialidad de física teórica, y no tendría tiempo de leerlos. Claramente, el crecimiento exponencial actual no puede continuar indefinidamente. Por lo tanto, ¿qué va a ocurrir? Una posibilidad es que nos autodestruyamos completamente provocando algún desastre, como por ejemplo una guerra nuclear. Sería una triste ironía que el motivo por el cual no hemos sido contactados por extraterrestres fuera que cuando una civilización alcanza nuestro estadio de desarrollo deviene inestable y se autodestruye. Sin embargo, soy optimista. No creo que la especie humana haya llegado tan lejos sólo para eliminarse a sí misma cuando las cosas se están poniendo interesantes.


*Stephen Hawking. El Universo en una cascara de nuez.

viernes, 27 de mayo de 2011

¿Que piensan los expertos?


Carl Sagan:

Durante un billón de años era evidente para todos que aparte de la Tierra no había ningún otro lugar. Luego, entre Aristarco y nosotros nos dimos cuenta que no éramos el centro ni el objetivo del Universo. Nos dimos cuenta de que el nuestro, era un mundo diminuto y frágil, a la deriva de un océano cósmico entre miles y millones de galaxias y billones de estrellas. Nuestro origen y evolución se debieron a grandes acontecimientos cósmicos. Estamos hechos de ceniza de estrellas. Por allí arriba en la inmensidad del cosmos, encontramos que no hay signos obvios de inteligencias extraterrestres y esto nos hace preguntarnos si las civilizaciones como la nuestra se precipitan de modo implacable hacia la autodestrucción. Hay muchos mundos en los que nunca nació vida, otros quedaron arruinados por catástrofes cósmicas, pero nosotros nuestro mundo hemos sido afortunados. Estamos vivos, el bienestar de nuestra civilización y de nuestra especie está en nuestras manos. Si no nos preocupamos de nuestra supervivencia ¿Quién lo hará?.

Texto tomado de: COSMOS de Carl Sagan. Año 1979.



Richard Heinberg.
 
 “Nos estamos encaminando hacia una nueva era caracterizada por el agotamiento de los recursos (y muy en   concreto el petróleo y el gas), la caída continuada de la energía neta disponible y la desaparición del espacio  ambiental disponible para poder lanzar residuos a la Naturaleza sin consecuencias inaceptables para las sociedades humanas. Estamos entrando ya en un siglo que quedará definido por los límites ecológicos, y por  nuestra respuesta a esos límites. La tentación será aplicar las actitudes y comportamientos que fueron  justificables y rentables en el pasado siglo a las crisis que enfrentaremos en este. Si fuera así, el resultado será  una catástrofe histórica monumental. En ningún otro terreno se podrá aplicar esta aseveración más  claramente que en nuestra actitud hacia el carbón (el último combustible fósil “todavía abundante”).  Simplemente, si lo quemamos, cocinamos al planeta Tierra y a nosotros mismos, al tiempo que perderemos los  beneficios económicos que vamos buscando. Tenemos sólo una pequeña ventana de oportunidad para caminar hacia un futuro deseable para nuestra especie mediante la reducción del consumo de combustibles fósiles, al  tiempo que nos orientamos hacia un régimen de energía renovable y un modelo de economía justa y  sustentable. Ha empezado ya el tiempo de descuento”


                                               “Blackout. Coal, climate and the last energy crisis”, Richard Heinberg.


  William Catton
 “Nuestra especie no es lo suficientemente sabia (‘sapient’) para lidiar con el mundo que ha creado (...), y dudo que  pueda evitar su colapso en el siglo XXI (...) conforme se tenga que enfrentar a la crisis ecológica”

                                               “Bottleneck: Humanity Impendig Impasse”, William Catton



miércoles, 19 de enero de 2011

Del caos venimos y al caos volveremos.


Del caos venimos y al caos volveremos.

Gustavo Cruz Chávez


Buscando respuestas a nuestras preguntas existenciales, nuestra vida suele ser un peregrinaje por; filosofías, religiones, partidos políticos, movimientos de todo tipo y también un reiterado apostatar de ellas cada vez que constatamos su falsedad, o su improbabilidad.

Hay personas que en su ferviente búsqueda de la verdad,  han sido devotos católicos o fanáticos cristiánanos de cualquiera de las diferentes denominaciones, otros han vestido túnicas de Hare Crisna, han sido gnósticos o rosacruces o masones o adeptos de grupos aun mas secretos. Catadores de las  corrientes del New Age, y de las variadas ofertas del esoterismo, hay quienes han podido emprender largos viajes hacia tierras de exóticos monjes, o ingresar en famosas universidades o lectoriums o pentágonos... y mas aun.

Hay también aquellos que asumen  la actitud de: Yo creo que “La Fe” es solo un acto de fe, un auto-engaño caritativo.  Son los del bando de los escépticos, los laicos, los ateos ... Entre estos hay quienes aun continúan en búsqueda de las “verdades ciertas” en la ciencia, y hay quienes, desilusionados ya, han cesado el peregrinaje hacia las  “respuestas definitivas”.

También habrán quienes han sucumbido a ser fieles militantes de alguna religión o línea política o filosofía en la que en el fondo ¡No creen!  Algunos Incluso militan activamente en ella y medran filosóficamente (y económicamente) de su estructura. ...Con unos kilos por demás y una familia que mantener, ¿Quien podría culparlos por ello?

Los mas, se habrán inclinado (o conformado) con simpatizar o militar en algún partido político de los que: O bien pretenden cambiar “revolucionariamente” el viejo statu quo, o de los que tesoneramente pretenden mantenerlo. ...Pero, reconozcámoslo, ya es historia en el presente: El socialismo fracasó, el imperio de los pobres, la “dictadura del proletariado”, no funcionó ...Pero tampoco la “tiranía de los ricos” esta funcionando, el desgastado capitalismo occidental se bate en retirada, y frente a el, sus nuevos oponentes: Los neo capitalismos que retornan apresuradamente del mundo socialista, (La URSS y China “comunista” por ejemplo) y están en efímero ascenso que solo durara mientras logren surfear en la cima del “pico petrolero”, o mas claramente dicho: del “cenit energético ”... Casi nada.

Es que: “Creced y multiplicaos y henchid la tierra” ha sido el único mandamiento que se ha cumplido a plenitud... Aunque para muchos esta absurda “divina instrucción” es solo una impostura de los mentecatos que inventaron a Dios. Pero si Él existe, debe estar sobre alguna nube, reventándose de risa (o llorando amargamente) por la ingenuidad y estupidez humana.

Es que pronto los seres humanos habremos sobrepasado los 7.000 millones de habidos consumidores, depredando exponencialmente un planeta que colapsa ecológicamente, una tierra que ¡Ya no nos soporta!. Estamos en la “cúspide de la arrogancia” pero también eso durara solo un instante... luego: El inicio del “cenit de nuestra civilización”... Quizás ya estamos en ella, pero aun no lo percibimos... no queremos percibirlo.

¡Soberbia herencia para nuestros hijos!!! Maldecirán amargamente a las irresponsables generaciones que les precedieron, es decir... A nosotros.

¿Que viene después?... Nadie lo sabe. Los “especialistas, analistas, predictores”, solo logran ver el caos que se avecina.

El pueblo, Las masas... ¡Ni se enteran! No pueden ver mas allá de algunas centenas de platos de comida en el futuro. Pero parecería ser que existen grupos de desesperados “ilusos ilustrados” que estarán ya  construyendo secretamente las “arcas” que teóricamente salvaran a su descendencia del colapso civilizatorio que se avecina... ¡Mejor intentar algo, que nada!

Quizás sobrevivan unos cuantos.  Aterrados sobre “una nueva tierra y unos nuevos cielos”, serán incapaces de mantener viva “la hoguera del cocimiento” porque habrán heredado solo las viejas mentiras... entonces, habiendo producido una nueva era paleolítica,  inventaran alguna nueva religión, alguna cosmogonía nueva para explicar el “nuevo mundo” colapsado.

De 7.000.000.000 habitantes sobre una tierra depredada, “After the last energy crisis”, ¿Cuantos sobrevivirán? . Para ellos, las peores tiranías están por llegar... pero quizás los hombres se lo merecen.

Al final, Solo la Entropía vence.